Todo en Bodegas Moralia está orientado a la búsqueda incesante de la calidad. Desde nuestras parcelas, en las que se respeta la tradición y se supervisa el campo a diario, hasta la propia bodega.
Las variedades de uva utilizadas también han sido un elemento clave. Así, se apostó en la zona por la Verdejo, cuando aún no había demostrado su adaptación al terreno, al tiempo que se elaboraba con la variedad autóctona, la Tempranillo y se experimentaba con la Merlot, que aporta mineralidad y carga aromática, a pesar de que es propia de zonas más al norte.
Nuestra bodega, que dispone de una excepcional sala de envejecimiento en barrica, está adaptada a la más moderna tecnología, con los controles automáticos necesarios y nos beneficiamos del hecho de que las parcelas de uva se encuentran en los alrededores, garantizando la recepción inmediata de la uva para preservar su máximo potencial.